Para la mayoría, aunque aún queden los últimos coletazos del verano, las vacaciones han llegado a su fin. Para muchos, su principal preocupación estética en el momento de volver a la rutina es mantener su bronceado el mayor tiempo posible. Pero para otro perfil de cliente, consciente de que la exposición solar no solo aporta beneficios, sino que también acarrea algunos efectos negativos, la prioridad es recuperar la salud de la piel, a veces muy castigada después de largas jornadas de playa.
Sabemos que el aumento de la oxidación de los tejidos y de la producción de radicales libres es una de las consecuencias más directas del exceso de sol (más aún cuando se ha tomado sin la protección adecuada), ya que se ven afectados directamente los niveles de colágeno y elastina y provocan, en consecuencia, un envejecimiento prematuro.
Dadas las numerosas propiedades del ozono, el tratamiento en la cabina Ozonithy es una de las soluciones idóneas para reparar la piel después del verano. No solo porque contrarresta la excesiva producción de radicales libres (que provocan alteraciones en la estructura y función de las células) y regula el estrés oxidativo, sino que además activa el normal funcionamiento celular y estimula la regeneración del tejido cutáneo.
Apto para todo tipo de pieles, está especialmente indicado para las más castigadas, con síntomas de deshidratación, falta de oxigenación y envejecimiento prematuro y para personas sometidas habitualmente a otros factores perniciosos, como la contaminación o el tabaco.
El resultado tras el tratamiento con Ozonithy es una piel purificada, oxigenada y relajada, con efectos apreciables desde la primera sesión (bastan diez minutos). Y no solo sale beneficiada la piel, sino todo el organismo en general.
Si ya en sí mismo el baño de ozono es altamente recomendable como terapia reparadora, resulta ideal como paso previo antes de someterse a otros protocolos de belleza, ya que la piel, completamente limpia, será mucho más receptiva y se conseguirán mejores resultados de los tratamientos posteriores.